Crónicas de la venezolanidad: oido por casualidad
En este reencuentro acústico con mi tierra, no ceso de sorprenderme, a veces, por las cosas que oigo. De todos los tipos, de todas las índoles, de todos los colores, de todos los registros, en todos los sitios por donde voy pasando. Así, decidí hacer un pequeño muestrario, sólo uno, para dejar registro de estas maravillas del cotidiano que me acompañan en mi caminata.
Conversa uno:
En una computadora, un chico y una chica se encuentran oyendo musica mientras trabajan.
Ella: Esa canción es preciooosaaaaa... ¿no la has oído?
El: No... no, para nada.
Ella: Cómo es que no la has oido?! Es la misma que está en la pista 6 del disco que te quemé con todas las canciones que nos hemos dedicado desde que empezamos...
El: ... (silencio)
Conversa dos:
Suena un celular y lo atienden repetidamente. El que llama tranca siempre luego del primer "aló". A la tercera o cuarta vez que se produce esto, se inicia un diálogo:
Dueño del celular: Aló... aló... aló?
Interlocutor: Aló
Dueño del celular: sí, diga.
Interlocutor: .... (silencio)
Dueño del celular: Aló? Quién llama?
Interlocutor: Soy yo, el huevo.
Dueño del celular: aaaah... ta bien. Métetelo, pues!
Fin de la comunicación.
Aclaratoria para los lectores no venezolanos: "huevo" es un mote que se le dá al organo externo del aparato reproductor masculino, el pene, además de la noble postura de la gallina.
Conversa tres:
Una clase de fonética de francés que improvisan dos colegas para enseñar a una alumna.
Profesor 1: Pero si hace nada te salió perfecto! Yo no entiendo qué te pasa ahora... "Un... un... lundi..."
Alumna: (en simultáneo con el profesor1) Un... un... lundi...
Profesor 1: yo no entiendo qué te pasa, ahora no te sale y hace rato te salía perfecto...
Profesor 2: yo te lo dije, lo que pasa es que tu eres muy porfiado, ella tiene un problema para oir...
Profesor 1: qué problema ni qué problema! Ella oye perfecto!
Profesor 2: Oye perfecto... ella no puede oir perfecto nada! No ves que tiene una muela en el oido? Tu dile lo que le quieras y ella lo adapta a como le parece que lo oyó! Eso es porque tiene una muela en el oido!
Todos: risas...
Conversa cuatro:
En la fila que se hace en la parada de un autobús del servicio de metro hay una señora, un señor de mediana edad y una chica esperando. Quejándose ruidosamente, con un bolso que resulta visiblemente pesado, viene un señor de la tercera edad. Por la forma en que habla del pasado político de la nación, su profesión ("cuando yo era periodista, cuando en este país se hacía periodismo de verdad...") y la lógica conexión que todo tenía con el cargamento de mangos en su pesado maletín, es bastante probable que padezca de alguna especie de demencia senil. Se abren las puertas del autobús y suben, según venían haciendo la cola, la señora, el señor de mediana edad, la chica y el señor. La chica compra un ticket:
Chica: Me da uno, por favor.
Operador del autobús: tenga... tendrá sencillo?
Chica: déjeme buscar...
Señor de la tercera edad: Con su permiso, señorita, que su espalda me impide avanzar y este bolso pesa más que un matrimonio obligado...
Chica: (haciéndose a un lado, sonriéndole al operador del autobús, completa la frase con un) "...con muchacho incluido, señor"
Señor de la tercera edad: Un muchacho era yo en la época en que Betancourt ganó. Y nos incluyó en la campaña diciendo que éramos el futuro de la nación... un futuro que todavía podía comer mangos que se robaban de las matas por ahí sin que les dijeran que eran muy viejos para andar con esas zoquetadas..."
Aclaratoria para los lectores no venezolanos:
Cola: Fila, línea de espera que se forma frente a algún sitio mientras las personas aguardan su turno para ser atendidos.
Zoquetada: tontería, bobada.
Solo puedo reirme ante todo esto... ¿Qué opina usted, mi querido lector?
Conversa uno:
En una computadora, un chico y una chica se encuentran oyendo musica mientras trabajan.
Ella: Esa canción es preciooosaaaaa... ¿no la has oído?
El: No... no, para nada.
Ella: Cómo es que no la has oido?! Es la misma que está en la pista 6 del disco que te quemé con todas las canciones que nos hemos dedicado desde que empezamos...
El: ... (silencio)
Conversa dos:
Suena un celular y lo atienden repetidamente. El que llama tranca siempre luego del primer "aló". A la tercera o cuarta vez que se produce esto, se inicia un diálogo:
Dueño del celular: Aló... aló... aló?
Interlocutor: Aló
Dueño del celular: sí, diga.
Interlocutor: .... (silencio)
Dueño del celular: Aló? Quién llama?
Interlocutor: Soy yo, el huevo.
Dueño del celular: aaaah... ta bien. Métetelo, pues!
Fin de la comunicación.
Aclaratoria para los lectores no venezolanos: "huevo" es un mote que se le dá al organo externo del aparato reproductor masculino, el pene, además de la noble postura de la gallina.
Conversa tres:
Una clase de fonética de francés que improvisan dos colegas para enseñar a una alumna.
Profesor 1: Pero si hace nada te salió perfecto! Yo no entiendo qué te pasa ahora... "Un... un... lundi..."
Alumna: (en simultáneo con el profesor1) Un... un... lundi...
Profesor 1: yo no entiendo qué te pasa, ahora no te sale y hace rato te salía perfecto...
Profesor 2: yo te lo dije, lo que pasa es que tu eres muy porfiado, ella tiene un problema para oir...
Profesor 1: qué problema ni qué problema! Ella oye perfecto!
Profesor 2: Oye perfecto... ella no puede oir perfecto nada! No ves que tiene una muela en el oido? Tu dile lo que le quieras y ella lo adapta a como le parece que lo oyó! Eso es porque tiene una muela en el oido!
Todos: risas...
Conversa cuatro:
En la fila que se hace en la parada de un autobús del servicio de metro hay una señora, un señor de mediana edad y una chica esperando. Quejándose ruidosamente, con un bolso que resulta visiblemente pesado, viene un señor de la tercera edad. Por la forma en que habla del pasado político de la nación, su profesión ("cuando yo era periodista, cuando en este país se hacía periodismo de verdad...") y la lógica conexión que todo tenía con el cargamento de mangos en su pesado maletín, es bastante probable que padezca de alguna especie de demencia senil. Se abren las puertas del autobús y suben, según venían haciendo la cola, la señora, el señor de mediana edad, la chica y el señor. La chica compra un ticket:
Chica: Me da uno, por favor.
Operador del autobús: tenga... tendrá sencillo?
Chica: déjeme buscar...
Señor de la tercera edad: Con su permiso, señorita, que su espalda me impide avanzar y este bolso pesa más que un matrimonio obligado...
Chica: (haciéndose a un lado, sonriéndole al operador del autobús, completa la frase con un) "...con muchacho incluido, señor"
Señor de la tercera edad: Un muchacho era yo en la época en que Betancourt ganó. Y nos incluyó en la campaña diciendo que éramos el futuro de la nación... un futuro que todavía podía comer mangos que se robaban de las matas por ahí sin que les dijeran que eran muy viejos para andar con esas zoquetadas..."
Aclaratoria para los lectores no venezolanos:
Cola: Fila, línea de espera que se forma frente a algún sitio mientras las personas aguardan su turno para ser atendidos.
Zoquetada: tontería, bobada.
Solo puedo reirme ante todo esto... ¿Qué opina usted, mi querido lector?
3 Comments:
opino...
que me encantaria platicar con vos mujer de ojos grandes...
tengo tu exilios de laura @ correo caliente y el mio es normasaggu@correocaliente.com *si me entenyes??? jajaja
bueno espero encontrate pronto mujer..... tanto tanto tiempo...
vuelo
jajjajaj ,si ahora que estoy afuera y uno valora tanto esas cosas.
Los bolivianos nos dicen que hablamos muy rápido y que nuestro acento es todo cantadito. A mi me pasa con ellos que les entiendo la mitad. Porque mezclan palabras indigenas con el español o porque me parece que hablan también rápido.
Y si es verdad, venezolanidad pura.
Besos
Con las orejitas paraditas:
Pajara Pinta: Claaaro! Otra manera de oir el español siempre será bienvenida! Y más siendo tuya la invitación!!
A ver cuándo coincidimos que ya me ilusiono con el encuentro! :D Abrazotes!!
Rodolfo: Ay señor! ahora ves la venezolanidad como la veo yo. Luego de vivir afuera un tiempito, uno valora esas cosas...
Así que nosotros les parecemos rápidos? Pero cómo será eso posible si dices que ellos te parecen rápidos a tí? Y esa mezcla es como compleja, no? Hm... me recuerda a ciertas conversas con un amigo del sur que tiene tendencia a hablar rápido, cortar palabras, ponerle una música claramente regional a sus palabras y a usar modismos de su tierra: Chile.
Linda la diversidad de músicas que cantamos en nuestro idioma... no crees?
Un abrazote!!
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